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La Diputación de Castellón refuerza junto a Facsa su apuesta por una gestión hídrica responsable con el I Ciclo Formativo para dirigentes del agua

La Diputación de Castellón refuerza junto a Facsa su apuesta por una gestión hídrica responsable con el I Ciclo Formativo para dirigentes del agua
29 de Mayo de 2025

El Salón de Recepciones congrega a más de un centenar de representantes políticos y profesionales de la gestión del agua en la primera de las tres jornadas que contempla la iniciativa impulsada por el Gobierno Provincial.

La provincia de Castellón ha dado un paso estratégico hacia un modelo de gestión hídrica más eficiente, resiliente y sostenible con la inauguración del I Ciclo Formativo para dirigentes del agua, una iniciativa pionera en España que ha impulsado la Diputación de Castellón en colaboración con Facsa con el objetivo de convertir a los 135 municipios de la provincia en referentes en gobernanza del agua.

El acto, celebrado este jueves en el Salón de Recepciones del Palacio Provincial, ha contado con la presencia de la presidenta de la Diputación, Marta Barrachina, quien ha sido la encargada de abrir oficialmente la jornada. Junto a ella, han participado responsables municipales, técnicos del sector y representantes de Facsa, empresa colaboradora de esta iniciativa: Enrique Gimeno, presidente; Elena Llopis, consejera delegada y José Claramonte, director general.

Bajo el título ‘Pasado y presente del agua urbana en la provincia’ esta primera sesión ha puesto sobre la mesa una mirada multidisciplinar que permite entender cómo se entrelazan factores técnicos, políticos y sociales en torno a este recurso esencial. Las intervenciones han comenzado con una reflexión guiada por el Catedrático de Mecánica de Fluidos de la Universitat Politècnica de València, Enrique Cabrera, sobre la sostenibilidad del modelo actual en España, marcada por condicionantes socioeconómicos y decisiones de política hídrica. A ello se ha sumado la importancia de las aguas subterráneas como pilar del abastecimiento en la provincia, donde José Ramón Jiménez, geólogo de la Diputación de Castellón, ha subrayado su valor estratégico como los riesgos que enfrenta. Finalmente, Ignacio Sangüesa, jefe del Servicio de Infraestructuras de la Diputación, ha ofrecido una visión integradora sobre la evolución histórica, los retos actuales y las oportunidades de futuro en torno al agua en el territorio castellonense.

 

Formación adaptada a cargos públicos

Este primer ciclo, que se desarrollará durante el año, ha sido concebido para ofrecer formación especializada a los cargos públicos y profesionales que tienen responsabilidades en la gestión del agua, desde alcaldías y concejalías hasta perfiles técnicos y operadores municipales. Todo ello con un enfoque claro: impulsar una transformación profunda y estructurada del modelo de gestión del agua en la provincia.

En ese impulso a una transformación profunda y estructurada, la presidenta de la Diputación, Marta Barrachina, ha destacado la importancia de implicar a los profesionales de los municipios de la provincia con responsabilidades en la gestión de estos sistemas para, juntos, avanzar hacia una gestión más sostenible del agua. “Este tipo de espacios formativos son más necesarios que nunca ya que el agua en un recurso esencial e insustituible. En nuestra provincia, además, representa un reto técnico, una prioridad política y una responsabilidad compartida que exige visión y compromiso”, ha resaltado Marta Barrachina.

La dirigente provincial ha incidido en que, en ese camino a seguir, hay que tener en cuenta la realidad actual de la provincia de Castellón y, en este punto, ha hecho un repaso a las actuaciones que lleva a cabo la institución provincial en materia hídrica. Un compromiso real y efectivo que se traduce en el incremento de un 82% el presupuesto hasta alcanzar los 28,4 millones; “una apuesta firme y decidida por garantizar el acceso al agua y la sostenibilidad hídrica en nuestra provincia”, ha incidido la máxima representante de la institución provincial.

Dentro de ese presupuesto destacan los 14 proyectos de construcción y mejora de depuradoras, a lo que hay que sumar el servicio de mantenimiento de otras instalaciones de depuración de aguas. Marta Barrachina también ha destacado el proyecto de notable recorrido que permitirá medir y digitalizar las principales variables hidráulicas en los municipios de menos de 20.000 habitantes, el PERTE, además de los 2,2 millones de euros reservados para obras para garantizar el suministro de agua potable y 1,5 millones de euros en AGA, ayudas para la garantía de agua potable. Y, a todo ello se suma un hito importante como es el Consorcio Provincial de Aguas, con el objetivo de lograr cohesión, eficiencia y solidaridad en la gestión de los recursos hídricos en el conjunto del territorio.

Por su parte el presidente de Facsa, Enrique Gimeno, ha subrayado que “este primer Ciclo Formativo nace con la vocación de marcar un antes y un después en la gestión del agua en los municipios de la provincia”.

Las próximas sesiones del ciclo abordarán, respectivamente, la planificación provincial del agua centrada en la eficiencia, la digitalización y la renovación de infraestructuras; y el futuro del agua en Castellón, con especial atención a los retos globales y locales que marcarán la agenda hídrica de las próximas décadas.

 

Directrices para una gestión sostenible del agua urbana

Los contenidos del ciclo parten de la obra ‘Directrices para una gestión sostenible del agua urbana’, escrita por Enrique Cabrera y editada por Facsa, y se completan con informes técnicos, casos de éxito y presentaciones diseñadas para garantizar la comprensión por parte de asistentes sin formación técnica. Al finalizar el programa, se elaborará un documento de síntesis con las principales conclusiones, que servirá como hoja de ruta para avanzar hacia un modelo de gestión del agua más eficiente, equitativo y sostenible en toda la provincia.

La Diputación y Facsa reafirman así su compromiso con la innovación, la formación y la colaboración público-privada como ejes esenciales para afrontar los desafíos que plantea la gestión del agua en el siglo XXI.

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