El presidente José Martí destaca que esta “apuesta decidida de la institución” servirá para hacer del palacio “un referente cultural y turístico”
La Diputación de Castellón ha hecho una “apuesta decidida” para recuperar el patrimonio de la provincia y lo ha hecho, tal como ha explicado el presidente José Martí, con un proyecto a través del cual se sacará del olvido el Palau Santjoans de Cinctorres.
En una visita a la localidad dels Ports, Martí ha destacado la “iniciativa” tomada por la institución provincial al invertir 1,2 millones de euros en la adecuación de este palacio para convertirlo en un “referente cultural y turístico, además de ayudar a revitalizar la actividad en los municipios y frenar la despoblación”. Cabe señalar que del 1,2 millones de euros, 500.000 serán aportados por la Conselleria de Vivienda.
Martí recuerda que las propiedades de la Diputación de Castellón en la comarca, como son la Casa del Cardenal Ram en Morella y el Palau dels Ossets en Forcall, fueron rehabilitadas en su día por las administraciones. “En cambio, el Palau de Santjoans había caído demasiadas veces en el olvidado por la Diputación que, precisamente, es su propietaria. Esta situación no se podía permitir por el gran valor arquitectónico e histórico del palacio, razón por la cual vamos a hacer esta inversión para rehabilitarlo”, ha añadido el presidente.
Cabe señalar que la Diputación de Castellón acordará con el ayuntamiento un uso compartido en que el ayuntamiento tendrá su museo paleontológico y pictórico, y la Diputación también la utilizará para exposiciones propias, lo que será también una manera de descentralizar la actividad provincial y acercarla al territorio.
Historia
La casa de Santjoans, situada en el centro de Cinctorres, entre la plaza Vieja y el Sol de Vila, destaca como edificio del barroco y, actualmente, albergo el Museo de Dinosaurios. Perteneció a la casa noble de Santjoan, de la que procede el nombre del palacio.
En Cinctorres, el edificio tiene su origen en el siglo XV, aunque su estructura actual es del siglo XVII. Se trata de un palacio de estilo barroco de dos alturas y su fachada es de piedra despuntando un alerón de madera. Tiene una torre cuadrada con cubierta a cuatro aguas en el vértice de la cual aparece la Cruz de Malta y, en el interior, conserva los escudos heráldicos en policromía de las familias del Palacio.
En un salón figura otro escudo correspondiente a las armas de Santjoans, personaje natal de esta población muy recordado por su lucha contra los invasores franceses. En otra sala, en un piso superior, se nos presenta todo el pavimento y las paredes cubiertas de cerámica zoomórfica y destacan también las escalas interiores, de madera trabajada.
Su fachada contiene un escudo heráldico de piedra considerado Bien de Interés Cultural (BIC) y la casa en su conjunto es Bien de Relevancia Local (BRL). La Diputación de Castellón adquirió el palacio a su último propietario, un médico, en 1966. En 1981 se hicieron unos trabajos de rehabilitación sencillos y en 1992 se hizo un proyecto para ser hotel, que no se llevó a cabo.
